En ocasiones, la sociedad vive tan acelerada que no se detiene a mirar lo que les rodea, lo que los distingue de otros, lo que les gusta o atrae de otros o simplemente lo que los llena de energías y felicidad en la vida.

Somos tan frágiles y a la ves tan firmes, que no damos pie para situaciones que nos puedan quebrar, aunque sea para conocer.

Leyendo un poco, historias de amor pasadas, creo que debiésemos destacar esos amores y situaciones en las que me habría encantado vivir, dejando que me dominaran…. el deseo, el amor con locura, las miradas ocultas los encuentros fortuitos pero piadosos, etc. En este contexto me pregunto día a día, porque fue cambiando tanto el sentimiento de encuentro entre dos personas.

Ordenare la idea. Cuando estamos en los lapsus de conocer a alguien, en donde se dan diferentes ambientes y con esto me refiero a que podemos conocer a alguien por casualidad, por un tercero o porque vamos en la calle y nos llama la atención la persona a la que chocamos, o en una fiesta en un pub, en un local bailando….blablabla. Es en esos momentos lo que hacemos es comenzar a marañar en nuestro cerebro, ciertas imágenes que nos alimentan, como un cierto tipo de droga que nos dopa el animo, nos ponemos nerviosos (a esto estoy suponiendo que ya pasaste la primera etapa del conocerse), sale lo mejor de nosotros, sonreímos cada 5 segundos y nos da algo como una especie de cosquilleo en ciertos lugares del cuerpo que nos ponen en manifiesto que algo pasa.

La Biologia nos describe explícitamente que aquellas sensaciones, responden a nuestro estado biológico, que nos da luz verde a una persona en especifico, que cumple ciertas características y encaja con la estructura biológica nuestra. La experiencia fenomenologíca nos habla de las sensaciones a primera vista, y es ahí donde el primer referente es don Aristóteles, quien nos explica que conocimiento (abstracción de algo) se da en primera instancia a través de los  5 sentidos. La misma experiencia del ser es la propia union de dos seres que confluyen en un tiempo determinado y un lugar puntual de las vidas, sin embargo, de todas estas fuentes (teorías) de las cuales hay muchas mas, cual es la que podría encajar mejor con el concepto de todas las etapas para llegar al amor puro y verdadero.

La verdad no es lo propio de mi persona saber, no estoy ni cerca de poder comprender algo tan sofisticado, pero a la ves tan acomplejo que ni una palabra que derrame me llevara a describir, lo que experimento. Cuando yo me senté a comprender lo que estaba sucediendo en mi vida, ya me había acercado lo suficiente para decir, «tu eres la persona que quiero en mi vida», yo solo se que me perdí entre sus labios y ya no se que me paso, supuse que tenia los pies puestos en la tierra, aun lo creo así, pero cada ves que me detengo a ordenar mis ideas y sentimientos creo que me perdí y deje que alguien entrara en mi vida.

Desde estas mismas experiencias, y las experiencias nuevas, es donde contextualizaré ambas palabras que se encuentran en el titulo de este blog. Yo soy de las personas que cree férreamente que las sensaciones las encuentras a la vuelta de la esquina, también creo firmemente que estas entran a tu vida porque tu las deja»Las personas se dejan sentir, lo que quieren sentir y vivir» no es obligado ni menos esporádico, las experimentaciones ocurren porque le abres la puerta a la provocación, a través de los sentidos que te llevan  las sensaciones. Es en ese mismo orden que hay sensaciones inmediatas y otras que se van obteniendo a través del tiempo y te llevan a querer y por efecto ultimo a amar.

Pero….¿Se puede llegar a sentir por alguien más este tipo de actos mediatos, que ya viviste y te llevaron a amar?….¿Como aprendemos los seres humanos a separar los sentimientos o sensaciones para que no nos provoquen dudas o conflictos amorosos?….¿Es posible amar a alguien y a la ves tener sensaciones por alguien más?. Cuando yo aprendi la palabra amor, fue tan teórico que hoy por hoy si la vivo a través de la experiencia, cada ves me asombra a tal punto que me confunde.

Algo de aquello que aprendi en el aula fue que el ser humano convive con diferentes amores, filial, de padres, del ethos, de  hijos, de amigos, etc. Lastima que en la práctica uno lo vea tan poco relacionado. Entonces cuando conoces a diferentes personas y las quieres en tu vida, pero no entiendes el «como» se vuelven inexpugnables. El otro día comenté acerca de aquellos amigos de los cuales están tu vida para ayudarte a crecer, pero para ellos tu eres la persona que aman, entonces nos volvemos inexpugnables para ellos. Todo esto es super confuso. Yo amo a mis amigos, pero no es el mismo amor que tengo por mi madre, mis hermanos o el amor que siento por mi mujer.

Evidentemente lo inexpugnable no esta comprometido en los tipos de amores, pero si se puede evidenciar, en los limites de ciertos amores….no puedo tener un amor de pareja por más de una persona, aunque si puedo tener 20 mil personas que estén cerca de mi y amarlas de tal manera que ellos sientan el afecto y eso es en orden a la amistad, esto es la totalidad de lo accesible, aquí esta el antónimo de lo inexpugnable, ¿Pero cuando sabemos que aquello es inexpugnable o accesible?. Y es valido porque en la sociedad en la que vivimos todo es monógamo, no es permitido ampliar un espectro poligámico, por lo menos a la idea de pareja, es por eso que nos asustamos cuando vemos a alguien con mas de una relación amorosa a la ves, porque el canon establecido MADE IN CHILE es monogámico.

Quisiera decir más palabras de este tema, pero debo concluir con un pensamiento. «Más allá de querer la accesibilidad, debemos cautelar los sentimientos y sensaciones del resto, cuidar y proteger a quienes nos entregan parte de su vida, día a día, para que esas personas con quienes nos relacionamos de diferentes formas no nos terminen odiando y se terminen convirtiendo en seres inexpugnables a través del tiempo».

Eros, Philia, Agape, Ludus, Pragma, Philautia.

Todos los sentimientos amistosos para otros son una extensión de los sentimientos de un hombre para sí mismo.

Aristóteles

Alejandra Curín.